No quieras oírme cantar…
pero sé bailar.
(lo dice Kate; y yo)
pero sé bailar.
(lo dice Kate; y yo)
Cuando la voz se me hace imperfecta para nombrarte
vuelvo a la casa del lago…
…bailo, y vuelves con una lluvia de besos
para colmar mis gándaras de camelias.
¿Qué haces mirando la hora?
Entre tu cuerpo y el mío
entre mi boca y tu tarde
no existe el tiempo
ni el espacio.
*
The lake house - this never happen before by Paul Mccartney
vuelvo a la casa del lago…
…bailo, y vuelves con una lluvia de besos
para colmar mis gándaras de camelias.
¿Qué haces mirando la hora?
Entre tu cuerpo y el mío
entre mi boca y tu tarde
no existe el tiempo
ni el espacio.
*
The lake house - this never happen before by Paul Mccartney
Isabel,tu poema se une al video en relacón perfecta con las imagenes...
ResponderEliminarLa casa del lago,donde se para el tiempo y tiene lugar la eternidad del sentimiento.
Ese baile es un excelente ritual para invocar al beso, cuando la voz se vuelve silencio.
Mi felicitación y mi abrazo grande,amiga.
M.Jesús
El poema, la foto, el video, la canción, el sentimiento que despiertan tus letras, todo, es precioso, Isabel. Me quedo con la última estrofa porque es mi pensar también, cuando se ama no existe tiempo, ni distancia.
ResponderEliminarHermoso post.
Un fuerte abrazo.
Qué linda te ha quedado esta poesía, se nota que eres una mujer muy sensible. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarPreciosa entrada, la última estrofa del poema es una delicia.
ResponderEliminarBesos
Yo también me quedo con la última estrofa. "Gándara" es una palabra que sólo te leo a ti.
ResponderEliminarUn abrazo, Isabel.
Si ya empezando el poema es bellísimo: 'Cuando la voz se me hace imperfecta para nombrarte'.
ResponderEliminarMe encanta ese amor del que nos hablas, tan entregado, tan dulce y tierno. La suavidad con la que se deslizan los versos, es casi mágica.
Aunque la última estrofa es la más cautivadora, todo el poema me ha hecho suspirar.
Un besote.