viernes, 28 de mayo de 2010

Pude escuchar de tu voz el sueño del mar




Pude escuchar de tu voz el sueño del mar
-en mis ojos amaneció la flor del beso-
y en tu abrazo una danza de azucenas
hilaban crecientes de lunas por mi espalda.

Todo era amor, como en la ternura de una rosa
que recién despunta de su capullo
y se abre al cauce de la fontana del sol,
o busca la gota temblorosa del rocío.

Pude escuchar, sí, de tu voz la brisa libre,
así como juro, que escuché de tus ojos
la humildad de los manantiales,
y de tus generosas manos
la dulzura resbalando entre los dedos,
y ese sueño de amar alzándose en mi pecho.

Pude escuchar de tu voz el sueño del mar
sí, y no fue un sueño.


*

10 comentarios:

  1. Todo resbala y se abre al cauce de tu pluma,
    todo quiere hilar con la dulzura de tus versos
    que seducen y apasionan más que las rosas...
    y no es un sueño!

    En mi abrazo, estimada poeta.

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  2. "En mis ojos amaneció la flor del beso". Qué verso tan hermoso, y construido desde la sencillez. La imagen de la gota de rocío que tiembla también me ha inspirado en alguna ocasión. Tengo debilidad por las sinestesias, y aquí logras una muy buena añadiéndole una metáfora: "escuché de tus ojos la humildad de los manantiales".

    Lo único que no me ha gustado mucho es la sobreadjetivación en "férvidas crecientes", pero sé que a ti te gusta, así que no hay nada más que decir.

    Un abrazo, Isabel.

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  3. SEÑORA PASO A LEER SU MAGNIFICA POESIA QUE HACE EL DELEITE DE ESTE NOBLE CABALLERO . ES UN PLACER LLEGAR A SU HOGAR Y APRECIAR LAS BONITAS PALABRAS QUE ENGALANAN SU MARAVILLOSA POESIA. NOBLES BESOS POR SU ENCANTO.

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  4. No me parece que estés 'en off' Isabel, has logrado un poema tierno y delicado, que rebosa amor por doquier.
    Óscar ya ha señalado unos versos que me han gustado mucho, y agrego éstos:

    'danza de azucenas'
    'la ternura de una rosa'
    'la dulzura resbalando entre los dedos'

    La sencillez y claridad de tu poesía, con la profundidad de su contenido, se han vuelto tu firma.

    Es un placer visitarte, Isabel.
    Gracias por tu generosidad. Muchos besitos dulces.

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  5. hay mucha sencillez en tus versos pero rotunda a la vez cuando se desata en ti, los versos más sentido.

    precioso.
    un saludo

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  6. ISABEL,tu poema es un canto,que nace en la naturaleza y tú lo recoges con ituitiva sencillez.Las energías mágicas te inspiran, por eso puedes decir con absoluta claridad:
    "Pude escuchar de tu voz el sueño del mar.."

    Logras transmitirnos ese caudal suave,cálido e inagotable que viertes con generosidad.Es un placer leerlo y sentirlo.

    Mi felicitación y mi abrazo inmenso de letras.
    Feliz fin de semana,amiga.
    M.Jesús

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  7. Hermoso poema de amor que bien le roba un par de suspiros al corazón. Todo me ha gustado, pero me inclino un poco más por la tercer estrofa, la cual encuentro muy bella por su delicadeza y romanticismo.

    Un fuerte abrazo Isabel.

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  8. Que bonita inspiracion a orillas del mar,
    recuerdo en mi juventud mirando al mar
    mis pensamientos se volvian inquietos, ante
    la serena llegada de las olas, a tan bello lugar.
    un placer leerte.
    que tengas una feliz semana,
    un beso.

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  9. Con la dispensa de Óscar, a mí el verso que más me ha gustado es: "hilaban férvidas crecientes de lunas en mi espalda". Me ha parecido todo un universo. Bellísimo. Pero en sí todo el poema es una maravillosa colección de imágenes dulces, femeninas y delicadas. Un abrazo. PS: perdona mi llegada tarde pero mi esposo tuvo problemas graves de salud y tuve que alejarme un rato de estas queridas lecturas.

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  10. Si poemas atrás he suscrito el acento de tu lírica, Isabel, aquí permanezco un poco más pausado y releo, porque no todo me llena del todo. Opinar -y no siempre para decir me gusta-no es malo, sobre todo si se hace con respeto al trabajo de los demás.

    Verás, como en poemas anteriores, vuelves a construir sobre una metáfora maestra que colocas entre guiones para destacar su sentido. Pero el cuarto verso de esta primera estrofa me resulta -ya te han apuntado también antes- un poco forzado, por su doble sonoridad y por su extensión, fuera de línea.

    Y en la segunda estrofa, el uso de ese "recien" que emplean los poetas hispanoamericanos, aquí me desubica un poco, le encuentro innecesario en esa forma, cuando tenemos sustitutos de sobra para ese adverbio. Éso, era lo incierto.

    Lo demás es hermosura y quietud, parte del sueño.

    Un abrazo.

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